Tras varios intentos de regreso frustrados por las lesiones, Guillermo Coria volvió a la actividad en el Challenger de Belo Horizonte. Al igual que en su último torneo disputado hace 13 meses en Szczecin (Polonia), en Brasil, en el Pampulha Iate Clube, fue eliminado en primera ronda.
Pese a haber sido derrotado 6-3 y retiro (debido a un fuerte dolor en la cintura) por su compatriota Juan Pablo Brzezicki, fue importantísimo para el mago retornar a una cancha de tenis. De insertarse nuevamente en los primeros planos, el nacido en Rufino podría comenzar a recuperarse de una caída tenística que comenzó el 6 de julio de 2004, día en que perdió la final de Roland Garros con Gastón Gaudio.
Esa temporada había sido buena para Coria, ya que obtuvo dos títulos (Buenos Aires y Montecarlo) y llegó a cuatro finales (Hertogenbosch, Hamburgo, Miami y Roland Garros), pero luego del Grand Slam parisino se produjo el quiebre y terminó el año séptimo del mundo, cuando había llegado a estar tercero.
El 2005 había comenzado bien, con un aceptable torneo en Australia y con finales en Montecarlo y Roma, ambas perdidas frente al español Rafael Nadal. Arribó al Abierto de Francia con expectativas, pero el ruso Nicolay Davydenko lo eliminó en octavos. A esto le siguió perder en cuarta ronda de Wimbledon y tener un buen desempeño en el US Open, certamen en el cual fue derrotado en cuartos de final por el estadounidense Robby Ginepri. Ese año consiguió en Umag lo que es, hasta el momento, su último título.
El año pasado, su juego se vio plagado de imprecisiones y su rendimiento nunca fue el deseado.
El regreso de Coria es una buena noticia para el tenis argentino, que vuelve a tener en actividad a uno de los mayores talentos locales de los últimos años.
Pese a haber sido derrotado 6-3 y retiro (debido a un fuerte dolor en la cintura) por su compatriota Juan Pablo Brzezicki, fue importantísimo para el mago retornar a una cancha de tenis. De insertarse nuevamente en los primeros planos, el nacido en Rufino podría comenzar a recuperarse de una caída tenística que comenzó el 6 de julio de 2004, día en que perdió la final de Roland Garros con Gastón Gaudio.
Esa temporada había sido buena para Coria, ya que obtuvo dos títulos (Buenos Aires y Montecarlo) y llegó a cuatro finales (Hertogenbosch, Hamburgo, Miami y Roland Garros), pero luego del Grand Slam parisino se produjo el quiebre y terminó el año séptimo del mundo, cuando había llegado a estar tercero.
El 2005 había comenzado bien, con un aceptable torneo en Australia y con finales en Montecarlo y Roma, ambas perdidas frente al español Rafael Nadal. Arribó al Abierto de Francia con expectativas, pero el ruso Nicolay Davydenko lo eliminó en octavos. A esto le siguió perder en cuarta ronda de Wimbledon y tener un buen desempeño en el US Open, certamen en el cual fue derrotado en cuartos de final por el estadounidense Robby Ginepri. Ese año consiguió en Umag lo que es, hasta el momento, su último título.
El año pasado, su juego se vio plagado de imprecisiones y su rendimiento nunca fue el deseado.
El regreso de Coria es una buena noticia para el tenis argentino, que vuelve a tener en actividad a uno de los mayores talentos locales de los últimos años.
Gastón López.